En la creación de la inteligencia artificial, emerge una imagen de una joven de cabello rubio y largo que destila romance. Ataviada en un vestido negro que abraza su figura con elegancia, el contraste con su piel pálida resalta su belleza etérea. Delicadas flores rosa se entrelazan en su cabello dorado, añadiendo un toque de color suave y femenino. Su mirada perdida en el horizonte transmite anhelo y sueños compartidos en sus ojos. Con un fondo suavemente iluminado, la imagen captura la esencia de un amor dulce y melancólico, evocando emociones tiernas en un escenario de ensueño.
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